Facebook es una red social que, desde ya hace mucho tiempo guarda e intercambia información de sus usuarios que se escapa del alcance de la propia red. Pero más allá de la publicidad selectiva que nos aparece en nuestro perfil, ahora Facebook es capaz de encontrar personas con los que podría tener alguna relación aún sin guardar ningún registro de ellas, y nos las propone como contacto.
La causa de este misterio aún es desconocida al 100% pero el hecho de que esta red social relacione y vincule contactos que no guardamos en la propia agenda tiene una posible respuesta.
Primero de todo, hay que entender que Facebook consigue sus ingresos a base de Publicidad selectiva, por lo que retiene al usuario: consigue que éste comparta todos sus movimientos diarios, intereses y situaciones en la plataforma online. Estos lazos siguen creciendo hasta conseguir que Facebook pueda predecir incluso aquello que quiere comprar, lo que le gusta o los amigos que se hará en un futuro.
Así pues, Facebook combina elementos comunes de los diferentes usuarios (información de trabajos, estudios, redes de las que formas parte, contactos) y las mezcla con otros factores que hasta ahora, Facebook no desvela.
Pero estos otros factores son en realidad, el resultado de un algoritmo que no falla: al instalar la aplicación de Facebook en el móvil, ésta tiene permiso para adquirir información personal de su agenda, números de teléfono guardados, contactos de Whatsapp o incluso contactos de otras aplicaciones móvil. Es por esa razón que Facebook especula sobre las personas que podríamos conocer o que realmente conocemos.
Existen, además, otras suposiciones, cómo que al visitar un perfil de alguien que no es tu amigo, se registre la visita y el otro contacto reciba la sugerencia de amistad.